martes, 21 de noviembre de 2006

Vivir en el centro

La semana pasada me mudé a un pequeño apartamento en el ático de un edificio en el centro del pueblo donde vivo (Rota, Cádiz, España), un pequeño pueblo en la costa Gaditana que respira y vive del oceáno atlántico, y no fue hasta entonces que no me dí cuenta del verdadero valor de vivir en el centro, porque muchos han hablado del valor de vivir en el centro de una ciudad, sobretodo si es pequeña, pero hasta que no lo he experimentado no me he dado cuenta de ello.

Vivir en el centro, y en especial de este pueblo, supone un disfrute diario de los placeres que un pequeño pueblo junto al mar puede dar. Quizás lo más llamativo sea pasear diariamente (por placer o necesidad) por las calles estrechas llenas de casas blanqueadas con cal y cruzándote con personas que aunque no te conocen no te negarán un gentil "Hola". Aunque, desgraciadamente, nuestras ciudades cada vez se convierten en nucleos urbanos dispersos dónde la gente sólo acude al centro para hacer sus gestiones y compras, Rota aún conserva ese aire de pueblo que puede llegar a ser tan placentero y relajante. Todavía conserva esas calles tranquilas, dónde se respira el aire del mar (oceáno atlántico) y dónde te puedes parar a charlar con el ama de casa que barre la puerta de casa diariamente de una forma casi religiosa.

Pero de especial disfrute es cuando cae la noche (ahora oscurece a las 18:00 h), se encienden las farolas y ahora en invierno el señor de las castañas establece su puesto en una pequeña plaza muy cerquita de mi casa, añadiendo al ambiente un aire especial y único, dificil de resistir y disfrutar por breves segundos.

Además de todo eso, al vivir en el centro puedo ir andando a todos los sitios por su cercanía y tengo a mi disposición una variedad de escaparates que atraen mi curiosa mirada a pesar de verlos casi todos los días.

Y como no, oír a cada hora el reloj del ayuntamiento, que señala de forma inexorable e indefinida que acaba de terminar 60 minutos de vida, pero que comienza una nueva hora de vida, ¡Cuanta vida por detras! y ¡Cuánta por delante!

Y es que vivir en el centro, tiene algo especial.
Si algún dia os animáis a visitar Rota, esta web os puede servir de ayuda: Turismorota

0 Comments:

Post a Comment